domingo, 27 de marzo de 2011
La máquina de la escuela de Tonucci
En la imagen podemos ver una fábrica de producción en serie de alumnos. Vemos que entran en la escuela,que es obligatoria, distintos niños y niñas. En el piso de arriba está el encargado de enviar el material didáctico que posteriormente.tendrán que aprender los alumnos. Los que no valen para este tipo de tarea salen de la escuela expulsados cómo desechos y ahí se incluyen los niños con capacidades distintas que los mandan a clases diferenciales y especiales, los que son o van retrasados, los que están con drogas o alcohol, los que no han aprendido lo que la escuela decide. Por otra puerta salen los que sí han asimilado lo que les han enseñado: todos son iguales, no tienen expresión en sus caras pero son los que van hacer una carrera que les permitirá vivir holgadamente, tendrán poder y serán considerados como dignos y buenos ciudadanos por la sociedad.
Esta imagen no está nada alejada de la realidad que viví yo en mi etapa escolar. Entrabas al colegio con tres años. Sólo éramos niñas e íbamos vestidas todas iguales con un uniforme. Había un grupo pequeño de niñas que llevaban un uniforme distinto al nuestro. Iban a clases distintas a las nuestras y no podíamos mezclarnos con ellas. Lo que las diferenciaba de nosotras era que tenían menos dinero y eso era suficiente para que fueran un grupo marginal. Esta situación duró unos años porque pasaron a formar parte de nuestro grupo y se sumaron a nuestra clase. Había escuelas de educación especial donde iban los niños que tenían alguna discapacidad. En la escuela año tras año te metían una serie de conocimientos y normas y buen alumno era el que las seguía y el que no, repetía o era expulsado del colegio. Los padres sí que tenían acceso a seguir la educación de sus hijos (en la escuela de Tonucci, ni siquiera) pero tenían que estar en armonía con el sistema. ¿Qué ocurre hoy? Hoy se tiene en cuenta la diversidad, la integración, el desarrollo integral de la persona pero el sistema sigue siendo el parecido. Tonucci también refleja al maestro que pone calificaciones a los alumnos. Hoy día se sigue clasificando a los alunmnos por la nota que sacan en sus exámenes.. Es la herramienta más importante tanto para profesores como para los padres. El fracaso escolar es cada vez más alto y los que estén en esa situación se quedarán por el camino. Quizás hoy las notas reflejan un poco más que simplemente los conocimientos que se tienen de las materias. Vivimos en la era de la informática y es muy fácil acceder a los conocimientos. ¿Por qué no se valoran otros aspectos?
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